miércoles, 21 de noviembre de 2012

Cuando la máscara es la Clave (Parte 2)!

Continuación....

 
 
 
En uno de los andares compartiendo con gente nueva, alguien me dijo “El dolor es la clave del Crecer, si te duele debes verlo y vivirlo”; así que deje de beber, de pasar de cama en cama y empecé a dejar salir, todo ese dolor, para ver que clave me daba. Cerré mi corazón, casi un “Clausurado por remodelación”, porque hasta que no supiera que eran todas esas claves, esas coincidencias, no valía la pena seguirlo tratando de esa manera; así que por primera vez, empecé a cuidarlo y a creer que esas partes perdidas no estaban afuera, estaban en esas señales dentro de mi propia familia y tribu. Allí empezaron los sueños, los recuerdos encriptados…

Tenía solo tres años y con neblina a mi alrededor, recuerdo estar llorando y sin nadie conocido que me cuidara… tenía cinco años y el borracho esposo de mi tía empezó a tirarme y golpearme con naranjas como si yo fuera una diana… otro día me encontró solo en la carroza y me llamo, me dijo que tenía algo para mi, que será? Y entonces me clavo en mi brazo un clavo, y nadie escucho mis gritos… tenía seis, y estábamos varios primos en el árbol, jugando, y uno de ellos, ya de los grandes, empezó a meterme mano por una parte muy mía, no me gusto, eso es normal? me pregunte; pedí a gritos que me dejará bajar, a partir de entonces le tuve rabia, distancia y asco… tenía siete y mis padres solo peleaban y peleaban, mi madre hablaba muy mal de él, gritaba, tiraba todo y después se iba a seguir haciendo mascaras; mi padre gritaba, se defendía también, se ocupaba y se iba a beber; nadie me miraba… Tengo ocho años, nació mi hermana, todos la miran, todos la escuchan, yo descubro los libros y allí todo es bonito, hay historias felices; tomo las letras de mi padre, las mascaras de mi madre y empiezo a cambiar los personajes de mi vida, a cada uno le doy un nuevo carácter, a cada uno le pongo los atributos que yo si quería y empiezo a verme a mí misma así también, como alguien que usa una máscara, a lo mejor si soy buena, ahora si me van a ver, me van a querer… Aquí todos somos buenos!

Desperté y llore, llore por mis muertos, lloré por todas aquellas personas irreales a las que les había puesto una máscara para poder superar el dolor, llore por ese niños que nunca supo el juego que lo había protegido de sus recuerdos, lloré por mi madre real que llena de dolor se fue a vivir en el tiempo del nunca jamás, llore por mi padre y todos los niños de nuestra familia que nunca supieron lo que era un beso y una abrazo antes de dormir, llore porque esas mascaras nunca me dejaron verlos como eran en realidad y por lo tanto no me dejaban encontrar una persona real con quien compartir mi vida, lloré porque esa carga no me pertenecía y por amor la asumí; lloré por ese niño que vivido en sus historias hasta hace días; días que lo mataron y me lo arrancaron de golpe para mostrármelo porque yo andaba pidieron comprender las claves, ayer que me lo entregaron muerto. Aquí en su funeral, prendimos una gran fogata, para despedirlo cantando, estamos en la tribu, todos juntos, con Amor y con Dolor, aquí como ofrendas de una gran vida en el escenario, tus restos se queman junto con mil y una mascaras, junto a cada una de mis parejas que dieron vida a mis mil y una historias.
Gracias por dejarme y traerme, con cada clave, a este mundo donde “Veo las cosas como son”, sin máscaras, un mundo real, con una vida real, con personas reales, con situaciones reales y un Amor real con quien caminar.

En honor a mis muertos y a mis partes ya juntas.

Kalen.”

Cuando la máscara es la Clave! (Parte 1)


Erase una vez, en una tierra en donde no se sabe dónde y en un tiempo que no se sabe cuándo, una familia errante, con una tribu errante, que vivían de forma errante por los caminos que así los dejaban. Así entre carrosas, caballos, campamentos, pueblos y sus leyendas; se dedicaron a hacer lo que hacen todas las familias, vivir en círculo, celebrar los nacimientos, honrar a sus muertos haciendo lo mismo que ellos y nunca parar. Esta es la historia de uno de ellos, uno de sus hijos, su nombre Kalen que significa “El que posee las claves”, que a sus siete años ha vivido más de lo que cualquier niño de pueblo a sus veintiuno, y no por las algarabías que suelen vivir los que adolecen esa edad, sino por la intensidad de su mundo; esta es su historia y así la contó, cuando ya era lo suficientemente maduro para poder Ver:

“Escribir estas líneas después de tanto andar, implica que mucha agua ha corrido y muchas estaciones han pasado desde esos días que erraba con mi tribu y con mi familia; el simple hecho de escribir en estos tiempos es sinónimo de un privilegio heredado de mi padre, ya que esta es la época donde solo las familias nobles saben lo que es la pluma y el papel. Sin embargo como toda historia tienen su inicio, les contaré como empezó todo.

Los de la tribu, desde que yo recuerdo estuvimos juntos y errando desde siempre, con nuestras propias leyes y recuerdos, éramos un grupo de familias donde cada una tenía un talento para compartir, el nuestro era el Teatro, mi madre experta con sus manos creaba la más grandiosa gama de trajes y mascaras, las mascaras, esa era su pasión; cuando le preguntaba de donde había aprendido tomando en cuenta que el arte del teatro había empezado con ella, me dijo que una noche estando niña supo que esa era su pasión y allí empezó, la primera vez no dio muchos detalles; solo que años después yo mismo, por piel propia, sabría de que se trataba. Mi padre era el que escribía y daba los recitales, lo suyo eran las letras y era como extraño que ambos tan parecidos en su pasión del arte, también se compensarán en esos tiempos haciendo cosas que yo no entendía. Soy el mayor de cuatro, el único varón, con puras damitas alrededor, sin embargo mi corazón se quedo enmudecido con la nenita más chiquita, y lo digo sin remordimiento ya que con sus ojitos color almendra, sus rulos rojizos y su sonrisa de encanto, es la estrella de todos.

Cuando crees que lo normal, es lo que vives, terminas como yo diciendo que tuve una infancia normal, solo que hoy después de muchos de haberme ido, comprendo que el problema de lo “normal” es dar por “normal” eventos a los que debes poner límites y saber que no forman parte de tu naturaleza. Era en esa “normalidad”, en la guardaba dentro de mí una irá enmascarada de rebeldía y una urgencia de libertad por salir corriendo de ese lugar y esa forma de vivir. Lo irónico de los fantasmas es que cuando huyes de ellos se te aparecen por doquier, así que mi historia “real” comenzó hace quince años cuando salí de mi hogar.

Según nuestra tradición, a los veintiuno eres grande, como para elegir cuál será tu camino, si seguir con los tuyos o salir a explorar por tu cuenta; pero mi alma ya había elegido desde muy pequeño y si bien es cierto la vida diaria parecía lo suficiente normal para trabajar, comer y quedarse, no era lo suficientemente fuerte querer elegir una mujer de la tribu y repetir con ella luego de llegada la noche, lo que a través de las fogatas, repetían mis padres y entre otras parejas; los cantos, los bailes, los cuentos del teatro, las risas, mezcladas con licor, trampas, mascaras, engaños, abandonos, juegos y gritos de peleas, los cuales eran también parte de la cotidianidad y costumbre. Yo no entendía mucho, y solo me sentía confundido y molesto conmigo mismo, porque quien era yo para decir lo que estaba bien o mal, pero algo dentro de mi sabía que no era algo normal, era como si esas mascaras tomaran vida y me mostraran las dos caras de mis padres y de mi tribu, que ni podía ni quería ver, en ese momento; así que era más fácil creer que Yo era el extraño y que no pertenecía a ese lugar.

Pero, como les decía, mi historia empezó cuando me fui, a la edad que eras grande, decidí partir con la bendición de los míos, mis padres me dieron un fondo para empezar y así comencé a quedarme quieto de pueblo en pueblo,  trabajar, trabajar, trabajar era mi único a lo que dedicaba tiempo y energía, descubrí que si aquello de tener pareja implicaba tanto dolor, mejor era trabajar. Mi habilidad con las letras, me dieron ventajas; así que empecé a pulirme, encontré benefactores, amigos y en general empecé a vivir muy bien, libre y dueño de mis talentos. Sin embargo, cada vivencia me llevaba a lo que había visto en casa, a recordar nuestras costumbre y talentos, me llevaban a reconocer los míos; la responsabilidad, administración, claridad y enfoque de mi padre o la pasión, coraje, fuerza y entrega de mi madre; a pesar de la distancia, estaban más vivos y latiendo que cuando los tenía al frente.

Más algo seguía haciendo falta, algo que no se, parecía que mi corazón tenía partes perdidas y en la medida que no encontraba respuestas ni en libros, viajes, amigos, benefactores, trabajos o en el hacer; ese anhelo de encontrar mi “otra mitad”, se empezó a agudizar en mi corazón. Después de años de andanzas, aventuras y filtreos, tome el valor para meterme de lleno en eso llamado Amor, pero todo Amor va acompañado de dolor, así que esa es la historia que hoy les cuento.

Quince veranos desde entonces y las personas más significativas en mi corazón tienen tantas cosas en común entre sí que lo primero que lo primero que las unía, era Yo y volví a recordar a mis padre. Me gustaban las mujeres más atrevidas, apasionadas, independientes, inteligentes, conversadoras, risueñas, aventureras, ellas que siempre empezaban siendo tan perfectas, tan femeninas, y a las que me entregaba con vehemencia, devoción y pasión, sin freno alguno; ellas, las que de perfectas doncellas encantadas, pasaban a algún cuento de terror en un abrir y cerrar de ojos, haciéndome sentir confundido y sin salida; ellas que me mostraban como en los entretelones de una obra, destellos de comportamientos que no quería ver ni reconocer, abandono, adicción a juegos, bebidas, mentiras, engaños y un sabor de que yo no les importaba, que no me veían; así que como un disparo a media noche iban matando partes de mi, donde terminaban de golpe quitándose una máscara y mostrándose tal como eran.  

Me enamore de cada una en su tiempo, y entre ellas los despechos los pasaba evitando el dolor, queriendo olvidar y gastando mi tiempo en otras camas donde los labios y el corazón eran los únicos que no se tocaban para evitar sentir otra vez el dolor del Amor.

Después de tanto andar, como claves que se me mostraban, me acorde de mi hermanita y una frase que escribió siendo aún chiquita, “El Amor Real no duele, ni hace daño”, el Amor Real…bueno y que acaso lo que he vivido es irreal? Me moleste con el recuerdo y sentía que quien era esa pichurra para decirme a mí lo que era el Amor. Mientras mi rabia avanzaba empecé a caminar los bosques y caminos para gritar y botar eso que me estaba matando, y mientras iba y venía, viendo a los animales, recordé que en mi tribu decían los ancianos, que la rabia era solo una máscara que ocultaba el dolor. Las mascaras… y empecé a soñar con mascaras, ver mascaras, recordar mascaras; recordé que mi madre solo una vez y casi como comentario cómplice, admitió que la primera vez que sintió pasión por las mascaras fue cuando mi abuelo llegó disparando toda la noche después de una fiesta de la tribu, gritos y disparos para una niña de cinco años fue demasiado y allí encontró las mascaras; ahora recuerdo las horas en que no estaba y me dejaba solo, sumida en sus mascaras, sumida en su mundo, un mundo más bonito, evitando el dolor.

Continuara……..

martes, 13 de noviembre de 2012

Summa cum laude? O Sumas con Laureles?



Este el el tipo de artículos que cuando escribo, ya mi mente se está divirtiendo en pleno y eso me encanta! Es más mientras tomaba la decisión de arrancar, me acorde de mis dos primos y mi tía política, cuando hace unos cuantos años atrás yo le comentaba lo diferentes que eran, siendo en ese entonces chamos de menos de 20 años aprox. y ella me contaba “Lilian, es que yo los veo siendo hijos del mismo padre como si fueran hijos de dos hombres diferentes; el mayor hijo del Conde, educado, respetuoso, formalísimo y el otro, hijo del Chofer digo por lo guerrero, relax y aventurero”. Claro, pensé yo, no es igual ser chofer en Caracas que en Bogotá…jajajajajaja!

Y más que un tema de parentesco o no, este tema de hoy sale por los títulos y nuestra creencia sobre ellos, ser conde, chofer, ingeniero, doctor, licenciado, máster o carpintero ha dejado de ser nuestro oficio para convertirse en lo que nos da valor o no como personas. Y lo más interesante de esto más allá de lo que para cada uno de nosotros signifique este respaldo, es que mientras conversaba con unos amigos salió el tema de que un par de ellos tenían descendencia española así que empezamos a buscar el origen de sus apellidos y escudos; lo que me llamo la atención es que mientras uno de ellos dice, “Bueno, pero a la final condes, duques o títulos de nobleza terminaban siendo solo eso, títulos, con una casa, terrenos y nada de dinero!!”; se me vino de inmediato la frase o creencia tan instalada en nuestro ADN “Estudie hij@, estudie para que sea alguien en la Vida”. Cualquier parecido es una coincidencia? Digo, aquello de que con tantos títulos que tenemos por doquier me pregunto yo, ¿son estos directamente proporcionales a la prosperidad? O el habito no hace al monje?

Cuando lees a Robert Kiyosahy con su “Padre rico, Padre pobre”, él describe como su padre pobre insistía tanto en el tema de estudiar y estudiar, era un maestro de escuela, muy tradicional y con muchos títulos encima, su vida era “promedio” en términos de dinero y prosperidad; y más allá de los títulos hay una creencia que los distingue “el amor al dinero es la raíz de todo mal”, “no puedo afrontarlo”. Mientras su padre rico o en-vías-de-hacerse-rico, era arriesgado y creía en la auto-dependencia financiera, explicaba que siempre los alentaba a hablar de negocios, a ver las posibilidades de dinero en la cena ya que para él “el dinero es un poder”, que “al decir “no puedo afrontarlo”, nuestro cerebro cesa de trabajar” y de educar nuestra mente para ser “financieramente competente”. Interesante no?

Y con estas líneas no estoy hablando que esté en pro o contra de estudiar, yo he sido amante de estudiar y aprender desde que tengo uso de razón; y como facilitadora es parte de mi estilo de vida, ya que creo que una mente que no se abre al aprendizaje, se muere antes de tiempo. Sin embargo, me llama la atención que hasta hace no mucho, fui invitada a una boda y la tarjeta decía “Ing. Lilian Rodríguez” y sentí que no entendía esa necesidad de apegarnos a nuestros títulos como si dijeran más por si solos que lo que dicen nuestros nombres. En particular me siento muy agradecida a mi formación, ella me ha permitido darle balance dentro de mi a esa parte númerica y lógica junto con esa parte de servicio y creación; sin embargo es solo una arista de lo que soy y no límita o expande mi relación con la prosperidad.

Para mí la prosperidad es un estado donde “sin tener césped, tengo podadora” como dice Ricardo Arjona; un estado menta donde “sabes” que siempre hay recursos, gente, amigos, apoyo, afectos, confianza, y oportunidades para alcanzar lo que queremos. Muy lejos de ese “poquito porque es bendito”!. Sin embargo ese estado, respetando lo que digan otros expertos, está para mí muy lejos de las titularidades; ese estado de prosperidad y conexión con la riqueza viene de nuestro Ser, de  nuestras creencias con respecto al dar y recibir, o de nuestras etiquetas con respecto a cualquiera de estos temas. Entonces, si ves hoy tu balance pregúntate ¿A quién estás siendo leal?, ¿Qué supuestos han tenido que ser reales para estar donde estas hoy? Y si pudieras cambiarlos…. ¿Qué nuevos supuestos tendrían que ser para ti verdad, en aras de llegar a donde quieres llegar?

Nuestra historia, profesión, especialidades y estudios son recorridos que quedan a la luz cuando  conversamos, escribimos, compartimos con otros; solo cuando te muestras a otros, notas y otros notan con tus movimiento, tus palabras, tu rostro, tu trayectoria y tu capacidad de incorporar en tu vida eso que sabes, has vivido,  estudiado, leído o apasionado. Porque sin importar los títulos, a la final los laureles se colocan sobre aquellos que asumen el líder dentro de sí y caminan a lo que quieren, con el corazón y la pasión en la mano, con las ganas de servir en el alma y con la voluntad de hacer realidad aquello que los mueve solo a ellos. Y tú? Estás dispuesto a asumir el reto o a dormirte en tus laureles?

 


viernes, 26 de octubre de 2012

Sex or not Sex!


Y aunque Shakespare hubiera empezado con un Ser o no Ser, lo cierto es que nuestra realidad femenina nos lleva más, entre un Sex or not Sex!; puesto que la curiosidad de es la percepción y vivencia femenina de la Sexualidad se ha convertido en un talón de Aquiles y ojo crítico de nuestra sociedad. Cuando era niña, escuchaba a menudo a mi madre decir en momentos tensos y con pinta de conflicto, una famosa frase pro-risas y anti-peleas entre nosotros “Hablemos de Sexo”, frase que como bomba lacrimógena, humeaba el ambiente y lo dejaba perfecto para la evasiva; lo que pocos vieron, fue que muchos años después en un restaurant a punto de recibir la cuenta, mi madre pronunció estas mismas palabras y el metre español le dijo “Anda´a Sra, no hablemos, mejor hagámossslo!”. Así que lejos de pretender “hablar de sexo” o mostrar una experticia que le corresponde a otros, si me encantaría compartirles a que viene este tema.

Cenando con unos amigos, sale a la mesa por inquietud de uno de ellos, el boom literario que ha movido a las masas femeninas alrededor del mundo con la trilogía erótica “Las sombras de Grey”, lo interesante fue, que el planteamiento de este caballero fue “Uds. que trabajan con gente, averigüen…¿Que será lo que atrae a tantas  mujeres de esos libros?, tomando en cuenta que es puro sadomasoquismo!”. Así que antes de especular y compararlo con lo que como mujeres y terapeutas habíamos vivido; salimos con la semilla de la curiosidad sembrada y al día siguiente, ya estábamos todas, sumergidas dentro de estos tres tomos, cargados de un mar de seducción y erotismo, que sorprendentemente nos dio a cada una respuesta diferente sobre ¿Que será lo que atrae a tantas  mujeres de esos libros?. Así que les comparto algunas de nuestras impresiones.

El deber ser! Si es esto, no es aquello!  Dentro de la trilogía, aunque efectivamente incluyen una pizca de Sadomasoquismo, pero una de las cosas que más llama la atención desde mi punto de vista es que la chica experimentaba un eterno conflicto entre lo que siento, lo que me gusta, lo que debería ser o lo que no, porque se supone que el amor es así o no. Es decir, creencias! Por supuesto, esto es una joven de 21 años que está experimentando su primera relación sexual, muy madura e intensamente diría yo; más lo interesante, fue ver que en esos momentos que se atormentaba dentro de sus paradigmas, entre lo que debía ser la relación, el amor, el placer o el dolor; reconocía la maravillosa lucha entre “La Diosa que hay en mí” y mi “Subconsciente”. Al leerlo, fue como si proyectarán en pantalla, la eterna pelea del “Si pero No” que experimentamos muchas mujeres a nivel sexual. Por un lado, la piel al solo contacto responde Siiiiii, se emociona y hasta se humedece; mientras nuestras estructuras mentales nos dicen, “Eso no es Amor”, “Esto no es lo correcto”, “Yo debería sentir esto o aquello”, “Esto solo es un juego”, “Si hace esto y esto… entonces, veremos”; por el otro, muchas salimos de impulsivas a querer liberarnos, romper los paradigmas y dejarnos llevar por la piel, asumiendo que podemos desligar la emoción, es decir, “fríamente calculado”; a la final algunas caemos en un pozo donde empezamos a flagelarnos como víctimas de nuestros propios juicios o creencias sobre de la sexualidad, el amor y sus límites. Una amiga dijo, “lo que pasa es que hay muchas mujeres insatisfechas” y puede ser, la verdad! No lo sé!. Lo cierto es que muchos de los prejuicios de nuestra sexualidad, vienen del silencio, de no tener referencias, de no conversar acerca del sexo, y en esa edad que hasta el roce del viento nos hace vibrar, a quien le preguntamos?  Es como si hablar de sexo pudiera abrir un laberinto sin retorno, a lo mejor por aquello, a lo mejor por aquello de, si no lo menciono no existe? A lo mejor, no lo sé! Más en pleno siglo XXI lo que no se pregunta y se habla, se encuentra en Google y te hace especular. El tema es que hace tan solo 50-60 años la sexualidad era asociada con deber, procreación, obligación, responsabilidad, dolor, manipulación, agresión, violación o vejación y es hoy en día cuando queremos incluir al placer, que no nos sirven los conceptos de 50 años atrás. Después de la liberación sexual de los 60 y 70, vinieron en los 80 las consecuencias y empezamos a hablar de sexo seguro y muchas cosas más, pero el sexo seguro sin ver las etiquetas que traemos de nuestra familia o entorno, y su impacto en mi propia sexualidad, es como querer volar con todo y casa dentro del avión.  

Y quien Soy Yo? Que Yo puedo, qué? Y Yo hasta donde?  Dentro de la Programación neurolingüística (PNL) se rescata la importancia de concientizar nuestros cinco sentidos, ya que a través de ellos se reciben todos los estímulos y activan todos los químicos que hacen que nuestro cuerpo responda en una situación. Aquí la escritora presenta un repertorio descriptivo que estimula imaginación (Vista), sonidos y voces(Oído), sensaciones (piel, olores y sabores); que estimulan el erotismo y confirman todas las teorías, puesto que en la medida que avanzas en la lectura sientes que el Sr. Grey y tu son íntimos amantes, al punto que quieres verlo una y otra vez. Esto me recordó, un monologo al que fui, donde Luis Fernández jocosamente señalaba, el hecho de que como mujeres no re-conocíamos a nuestro propio cuerpo y sus necesidades, así después de un largo periodo de abstinencia sexual, al primer hombre que nos viera y coqueteara, lo etiquetábamos como “El hombre de mi vida, el padre de mis hijos” para justificar el permiso de una noche de locura y pasión. Guauu… entonces, cual es esa imagen, sonido, sensación, olor o sabor que nos dispara el deseo? En estos libros, si se plantean temas de Sadomasoquismo, pero a mi parecer se trata de, ¡El Placer! y como cada pareja tiene libertad, deber y derecho de explorar diferentes formas para llegar a ese placer; eso implica tenerlo presente como objetivo también en la relación, imaginar, ser creativo, jugar con tus sentidos, incorporar juguetes, buscar información, herramientas, definir cuáles son esos límites infranqueables dentro de la relación, es decir, asumir la responsabilidad de nuestro placer, ya que con tanta información no hay excusa para vivir en un concepto creado 50 años atrás. Que te gusta o no? Cuáles son tus límites? Conoces a tu cuerpo? Te das placer a ti mism@? O que está faltando para que reconozcas tu cuerpo y tu propio deseo? Son asuntos que solo te competen a ti, total, el peso de tu disfrute, no le corresponde a nadie cargarlo. Mírenlo, escúchenlo, siéntanlo, saboréenlo, experimenten su cuerpo, complázcanlo y coloquen límites! Conózcanlo! Así evitan, salir como desesperada en busca de una noche con cara de amor de novela; así empezamos un camino de Autovaloración y Poder personal. Aprender a Verse, tocarse y a honrar a esa Diosa sensual que hay en nosotras, a esa mujer que es capaz de soltarse y saber que exactamente es lo que le gusta o no, de su propia sexualidad. Paul Dennison dice que  “El movimiento es la puerta al aprendizaje”, yo agregaría “Y la curiosidad los guía”!

 “Había una vez… El eterno cuento de Hadas! Según la teoría del Imago¹, nuestras parejas son la perfecta proyección de nuestros cuidadores, es por eso cada relación no solo despierta heridas dormidas que nos hace contactar con un dolor más allá de la piel, y aún, cuando los medios se han ocupado de llenar nuestra mente de seres idealizados que vienen de mundos encantados, visten de azul o rosado; la realidad es que nuestra mente ya hizo su propia imagen de pareja, gracias a semilla del ejemplo que vivimos de niños. Una imagen que idealizamos y transformamos en el traje que le forzamos a usar a nuestras parejas. Nuestro cerebro (femenino) a diferencia de los hombres, le encanta tener todo junto y revuelto como un cableado sin inicio y fin, ellos mientras tanto, saben tener todo muy bien organizado en cajas, con separaciones firmes entre sexo, amor, esposa, madre, trabajo. Por eso, el trabajo de Pilar Sordo y otros tantos, hace hincapié que una relación trae como oportunidad dar inicio a nuestro crecimiento; porque, mientras nosotras debemos aprendemos a soltar y organizar en cajas separadas, ellos deben aprender a retener más sus relaciones y bajar estas separaciones. Y esto, que tiene que ver con el Sexo?  Con el hecho de que para mi, nosotras solemos hacer de estos temas un solo tumulto, Amor, Sexo, Poder, Abandono, Obligación, Hijos y quien sabe cuántos más, , es decir formamos una especie de molécula. Allí, el príncipe encantado debe cumplir Amor romántico y traerme rosas, ponerse el antifaz de noche y colarse en mi cama con un espíritu aventurero, complaciente y excitante, capaz de darme familia e hijos, ser padre y trabajador abnegado y responsable.  Y yo pregunto, ¿será que ese hombre existe o está fuera de los confines humanos?, ¿Y eres tu tan súper mujer como esperas el sea? No será eso lo que nos tiene agotados? ¿Y es que placer está necesariamente ligado a que se cumpla un combo familiar? ¿Qué es quieres vivir específicamente en una relación? ¿Qué crees del Sexo sin Amor? Y si lo asumes por amor a ti misma? A lo mejor es parte de nuestro camino de vuelta al equilibrio, abrirnos a soltar los idealismos, a lo mejor buscar personas reales que quieran conscientemente mezclar todo como un experimento, o a lo mejor implica que experimentemos lo que sería como mujeres separar la experiencia del sexo a la del amor y para ellos como hombres mezclarlas. Pues la pregunta es, y te ha funcionado tu estrategia? Te sientes llena? O que crees que puedes regalarte y experimentar?

Parafraseando lo que dice Joan Garriga, en su libro “Vivir en el Alma”, este gran terapeuta y psicólogo español dice algo como, “La Vida es una espiral creativa que se mueve entre dos pilares, la Muerte y la Sexualidad”. Y la sexualidad es como la muerte, un proceso de transformación que siempre viene acompañado con el dolor, el dolor mismo que al día siguiente te recuerda lo sabroso que la pasaste la noche anterior!. Un proceso de transformación continuo que implica valor para vivirlo y asumirlo; en comunidades antiguas el sexo era símbolo de comunión con nuestra alma siendo las mujeres (prostitutas sagradas) el canal para transformar el dolor de nuestros guerreros en éxtasis y así darles cabida nuevamente en la sociedad, ya que solo nosotras, por naturaleza,  logramos una entrega total, haciendo que nuestro cerebro se desconecte literalmente y experimente liberación cuando sentimos un orgasmo. El punto aquí es, hasta donde estamos dispuesta a asumir que mi sensualidad, sexualidad y placer; reconozco acaso estos elementos también es parte de lo que Soy como mujer? Y que depende solo de nosotras explorarnos y descubrir lo que nos gusta; ya que en este sentido no hay paradigma, dogma, etiqueta o religión que pueda saber lo que le va bien a tu piel, así que el Camino es personal y lleno de pruebas.

Tomar consciencia es atrevernos a “darnos cuenta” que somos esclavos de lo que pensamos, creemos y decimos acerca de nosotros mismos; más estamos en un momento de vida, donde “el deber ser” no sirven para lograr nuestras metas y los cuentos de hadas son solo cuentos; la vida real, amerita hombres, mujeres y relaciones reales dispuestas a asumir las reacciones de su cuerpo, las emociones que se despiertan, la mente que poner a prueba la elección de pensamientos, el alma quiere experimentar más, y la oportunidad de madurar y reconciliar todas estas partes de ti. Alguien me dijo hace tiempo, que las historias de amor más apasionantes se han escrito y vivido tras el escenario; sin embargo que pasaría si abrimos la puerta, si somos más abiertos con nosotros mismos y empezamos a caminar con orgullo, asumiendo la responsabilidad de nuestros deseos?.

 

 

¹H. Hendrix

sábado, 15 de septiembre de 2012

Eso llamado Amor!

"Durante toda mi vida he entendido el amor como una especie de esclavitud consentida.
Pero esto no es así: la libertad sólo existe cuando existe el amor. Quien se entrega totalmente, quien se siente libre, ama al máximo.
Y quien ama al máximo, se siente libre. Pero en el amor, cada uno de nosotros es responsable por lo que siente, y no puede culpar al otro por eso.
Nadie pierde a nadie porque nadie posee a nadie.
Y esta es la verdadera experiencia de la libertad: Tener lo más importante del mundo sin poseerlo." Paulo Coelho en  "Once Minutos"
 
Y sin embargo a estas alturas de vida con un inventario de momentos en los que he amado profundamente, me he sentido amada y otras que no tanto, sigo preguntándome que es eso llamado AMOR. Digo, cada uno de nosotros le ha dado un significado tan diferente que me pregunto, como es que nuestras limitadas experiencias sobre lo que el Amor o no, nos hace querer enjaularlo en un sobre conveniente de acuerdo a las circunstancias; digo, quienes somos nosotros parar juzgar si ama más el que abraza a su hijo y lo ayuda a caminar, el que en la distancia le aplaude por haberse levantado, el que abandona por las circunstancias o el que vive en el mismo techo acompañado pero en plena soledad?. Como diría una de mis mejores amigas, nadie tiene un “querometro” a la mano para saber quien quiere más a quien, o cuál es la formas más “acertada” de expresar el amar. Es Amar o la expectativa de lo que ese Amor me dará, lo que nos lleva a la locura o la felicidad?
A lo mejor, esa inmensa palabra, AMOR, tan real y etérea, sea la perfecta inspiración de nuestras acciones, emociones y palabras por siempre, a lo mejor es el tipo de sentimiento que por más que nades y nades, nunca lo encontraras en otra orilla si no es la tuya propia; a lo mejor Amor es ese impulso que te eleva más allá de tus propios límites y tus miedos, para que después te atrevas crear tu mejor versión. A lo mejor no tienen que ver con alguien que viene y despierta mariposas en tu estomago, a lo mejor es algo o alguien que llega en forma de remolino y se planta en forma de confianza en tu corazón,  de que pase lo que pase, siempre encontraras la forma de crecer.
A lo mejor, es esa sensación de profundo respeto por las decisiones de los que Amas y la soltura de dejar que cada quien siga su camino aunque te enfurezcas porque crees que sus decisiones implican caminos espinosos y empinados, pero a lo mejor, es soltarlos porque los reconoces grandes y sabes que hasta que no suban las montañas empinadas no sabrán lo dulce de una bajada.  Quién sabe? A lo mejor es abandonar lo que ya no te hace feliz para evitar abandonarte a ti mismo, dejar lo que no te deja avanzar para a lo mejor, comprometerte con tu propia felicidad.
Quién sabe? La madre dirá que ese, su amor, si es el verdadero e incondicional; pero y que diría el padre? o los hijos? Acaso, no dirían lo mismo? Los amantes también se juran que ese es el verdadero amor, pero el que se mata por un Dios también asegura lo mismo, los fanáticos también hacen cosas extremas por Amor, el mismo caos parece a veces producto del Amor cuando ves lo que surge de las cenizas, las parejas se separan aún con Amor y por Amor deben andar rumbos diferentes para no morir en el intento. Cuantas veces se ha usado el Amor para que se haga lo que alguien quiere? Cuantas veces lo hemos deshonrado? Y sin embargo, seguimos queriendo experimentarlo una y otra vez, como adictos, como locos, como niños, o como almas que a la final venimos a experimentarlo, ya que a veces solo una gota suya basta para recordarnos que es allí, cuando amamos, que nos sentimos llenos de Todo y Nada a la vez.
Qué o Quién lo contiene? Como lo limitamos? Que lo detiene? Que lo libera? Como sabes que es el verdadero? Y quien nos dice, que todos los tipos de Amor, no son los verdaderos también? y Como es que tu Amas? Cuando te sabes Amado? si pudieras imaginarte una forma de Amar diferente, Que sería para tí? Como lo vivirías? Como te sentirías? Que cambiarías?
No lo sé, solo sé que si es Amor no duele, y si duele es otra cosa, a lo mejor la idea que tengo pegada de él; así que sigo buscándolo en mi, en mis experiencias, en mi familia, en mis amigos, en la calle, en mis propias creencias, en la búsqueda de un hombre que están en algún lugar del mundo, a lo mejor buscándome también; pero si sé ,que encontré hoy este fragmento que debe tener mínimo quince años conmigo y que hoy volvió del olvdo para recordarme que…
“El Riesgo de Amar…. Nacemos para un reto: Vivir en el Amor!
Amar y ser amado, es sueño de adolescente, es garantía de amistad, es promesa de dos corazones, es objetivo de la vida humana.
En toda conquista existe el riesgo del desespero, aunque en el camino del Amor, tu debes esperar sin descanso, luchar sin angustia, caminar sin temor, sonreir con esperanza, comprender sin egoísmo…
Para Amar, hay que saber reír, aún corriendo el riesgo de parecer tonto; hay que llorar arriesgando parecer sentimental; acercarse al otro a costo de arriesgarse al compromiso; descubrir nuestro interior con riesgo de que conozcan nuestras debilidades; es exponer a los demás tus ideas y proyectos corriendo el riesgo de que te ignoren.
El riesgo de Vivir en el Amor, lo debes correr porque quien no arriesga ya ha fracasado. Quien no arriesga nada tiene, nada hace, nada es…
Amar es compartir, es generosidad, es altruismo, es Alegría, es constancia… es simplemente Amar. Solo arriesgando en el Amor, se aprende a luchar y a Vivir”
Autor Desconocido

martes, 4 de septiembre de 2012

Por los Ciclos de los Ciclos!

Cosa extraña el hombre; nacer no pide, vivir no sabe y morir no quiere.”

Facundo Cabral


Erase una vez, en una tierra sin nombre, un espacio donde la naturaleza y sus formas predominaban por doquier; un lugar donde imponentes montañas,  altos y frondosos bosques, caminos disfrazados de desolación, manantiales, brisas, aves y animales, habitaban y vivían allí en la armonía de  sus instintos.

Cada uno con su ritmo, cada uno con sus ciclos, cada uno con su propia forma de Ser. El viento soplaba libre y suavemente sobre los seres que allí corrían para recordar que solo un respiro permite la Vida y que si lo siguen podrían llegar más allá de sus límites; el Agua fluía sobre la tierra entre canales y caudales que le permitían dejar su huella por doquier, alimentando o protegiendo a quienes así lo necesitarán, a la final, sabía que sin ella no habría más pero que sin tierra por donde correr su existencia, no tenía sentido. Por otra parte, la Tierra  aunque aparentemente estática, se iba moviendo lentamente con cada toque de aire y agua, permitiendo así que sus bases sostuvieran a los arboles, ramas, flores, montañas y todo aquellas vidas que decidieran plantarse y caminar sobre ella. Y allí con ellos el fuego del corazón viviente, el latido de cada ser del bosque, con sus movimientos, con sus instintos, con sus esperanzas y con sus miedos; muchas clases, muchas formas, unos que vuelan, otros que corren, otros que nadan, otros que caminan; sin embargo esta historia solo se trata de pocos de ellos, específicamente de una Ardilla en particular.

Nació en un día de primavera con el Sol calentando su carita, sus ojos abiertos y grandes le permitieron desde que los abrió, percibir todos los colores a su alrededor verdes, amarillos, azules, rojos, marrones, revueltos como en paleta de acuarelas y en la medida que miraba se mezclaban más y más; entonces escucho cuando sus padres aseguraban que solo vería bien en unas semanas, así que siguiendo esas voces conocidas volteo para buscarlos, que calientito se sentía allí, protegido entre esas formas en las que se sabía amado. Su nombre Vito, lo conectaba con la vitalidad y  lleno de alegría, al punto que siendo el primero de sus tres hermanos, fue él, el que desde que nació, el que daba vueltas sin parar de jugar persiguiendo su propia cola. Fue esa misma inquietud con la que nació, la que desde pequeño lo hizo estar lleno de moretones, sus padres hablaban de esperar la maduración y de los peligros de su poca visión, sin embargo fue  después de mucho correr y sentir muchos plooom! que finalmente comprendió que sus ojos no veían con claridad las formas a su alrededor.

¡Qué mama dijo que estuvieras quieto Vito!- decían sus hermanitos. Pero fue solo el extremo de una caída del árbol donde estaban, la sensación de vacío, lo duro de la tierra, su colita y patitas partidas, su aliento desvanecido y la vergüenza al ver a su madre, le hizo comprender que habían cosas que no podía hacer (todavía). Su madre lo auxilio con amor y con el reproche en su cara, le dijo ¿O sea que solo vas a aprender a los golpes? Nuestra Naturaleza es movernos, pero seguirás tropezando con la misma piedra, hasta que Veas! Si sigues así, no vas a llegar al cuarto ciclo!!

Ah? Entre el dolor se preguntaba, que significaba esa frase, no llegar al cuarto ciclo? Pero inexplicablemente fue esa misma caída que lo obligo a quedarse quieto un rato y a no morir antes de tiempo, decía su abuela, la ardilla más antigua de la aldea. Ella le atendía las heridas, preparaba con ramitas una mezcla que olía horripilante y se la ponía en su colita y patitas, le hacía caminar lentamente grandes distancias todos los días, y como latigazos en sus piernas lo obligaba a recoger frutos, hojas y comida, decía- Antes que la perezca sea la que te mate, mover tus patas será lo que te salve!. Por más que quisiera correr y le ardiera su vientre al ver lo que hacían las demás de su tamaño, su dolor apenas le daba chance de caminar con su abuela, más su visión era cada vez más aguda, su olfato y oído se entrenaron con ella, que lo hacía recoger y reconocer solo ciertas especies, esta para el dolor, esta para el sabor, esta para relajar, estar para soñar, aunque para ti, habrá que darte una que te de fuerza y calma para los ciclos por venir!. Uhmmm ¡otras vez esos señores, los ciclos! De donde son? Que hacen? Porque mamá y todos hablan de ellos! Por más que preguntaba, nadie respondía, sus hermanos ellos solo le decía, haz caso Vito! Las reglas son esas! No preguntes! Y menos a los grandes!. Uhmmm…. Entonces a quien? Agrrrr…. Como le molestaban esas frases! así que tomando aire, preguntó ¿Abuela? ¿Qué o quiénes son esos a los que llaman ciclos? Porque les temen? Ella volteo y al mirarlo, un brillo diferente vio en su mirada, diciéndole, Si los ciclos quieres conocer, observa atento, que ellos te encontrarán!. Y en ese momento hasta su colita revivió y se movió solita en señal de… alerta? Miedo? O sencillamente excitación? … Ellos vendrán?

Y mientras el silencio llegaba a la casa de su abuela, él se mantuvo ocupado en las tareas de clasificar lo recogido, con sus preguntas galopando sin parar. Esa noche, camino a casa, había lago en el que se había encendido, a lo mejor era la señal de su colita ya fuerte, o la respuesta de la abuela, o sus preguntas; pero sabía que había algo diferente. A partir de su caída se hizo normal ver las cosas diferentes, día a día, toda la comuna se metía en un abrir ojos, comer, buscar comida y llegar agotados a dormir. Desde ese día, estar con la abuela significo aprender, nuevas palabras, formas, personajes y rutinas; ella siempre respondía en forma sorpresiva, a veces le daba un libro, a veces le mandaba a observar algo, siempre le preguntaba, conversaban. Efectivamente como dijo, los ciclos llegaron, comprendió eso cuando sus patas y colita sanaron, cuando sus ojos se abrieron completamente, cuando los verdes se apagaron y llegaron los naranjas, cuando mamá les cantó el primer ciclo, cuando el Sol se dejaba enamorar por la Luna y la Luna se dejaba dominar por el Sol, cuando recogieron y enterraros frutos para al llegar la blancura, tener que comer. Cada vez más rápido, cada vez más agudo, cada vez más curioso, cada vez más parlanchín, preguntaba y preguntaba, mientras su abuela le regañaba por su ansiedad. ¡Un día aprenderás que la naturaleza de las cosas está por encima de los deseos!, ¡Cuando domes tu propia naturaleza, podrás avanzar! Le decía su abuela.

Aunque había aprendido con ella, sabía que las palabras sin experiencia se desvanecían y no tenían sentido para él. Como tampoco tenía sentido vivir para solo recoger frutos, clasificarlos, guardarlos y comerlos! Para que? Solo para sobrevivir los ciclos? Como es que nadie responde!! Cuál es el propósito? Agrrrr…. Gruñía de frustración! a lo mejor la abuela tenía razón, a lo mejor el propósito de la Naturaleza es solo Ser!. Pero seguía sin saber que significa eso! Algo tiene que cambiar! se dijo en voz alta y siguió, pero al decirlo, su colita se movió como la varita mágica de los cuentos que leía donde su abuela, como cuando lo alertaba, como cuando sabía que lo que sentía era real, como si supiera que sus deseos se puedan hacer realidad!  

Esa mañana me levante alegre, un sueño fabuloso me visitó de noche, caminos, respuestas, alegrías y una estrella al final que siempre iba conmigo, eran suficientes para saber que Todo iba a estar bien! Mi abuela dice, “Cuando el corazón sonríe es porque está viendo los verdaderos colores detrás de las cosas!”, así que una nueva esperanza hizí que mi colita se moviera. Al salir a desayunar, todos habían salido ya, y me esperaba mi abuela, que hace aquí? Qué pasó? Con esa cara, podría decirse que a alguien le llego su ciclo!  Sus ojos me dicen más que su boca. Uhmmm… Buen día?

Desayuna muy bien Vito, espera una larga caminata hoy! – dijo ella sin mirarme, mientras preparaba una cesta. Y así lo hice, el frio que sentí recorriendo desde mi colita hasta las orejas, me decían que no era hora de rezongar. Luego me dijo- Muy bien, es hora de empezar el camino! . Así que bajamos, busque a mis padres y mis hermanos pero sin rastro de ellos, la seguí. Aunque su paso era lento por el peso de sus ciclos, cada pisada era fuerte y decidida; a diferencia que su mirada, su boca, me confundía pasando de un tema a otro, un rato me señalaba como reconocer la tierra fértil, el peligro o la seguridad, otro tanto me hablaba de la luna y sus ciclos, de las aguas y de la forma de los mares; sin embargo, los momentos de silencio se oían como gritos de angustia que se hacían más pesados que la cesta que cargaba. El camino era nuevo, diferente, solitario, ausente y crudo, como lo que iba a escuchar.

Vito, sentémonos aquí. Sabes que nuestra aldea tiene un orden, un ciclo, cierto?- dijo. Asentí, sin entender. Hay quienes despiertan con la seguridad que les da el hacer, lo has visto?- siguió. Si abuela. También has podido observar, que hay quienes nunca se han preguntado más allá de dos o tres cosas en todo su ciclo? Si, pero ese es el tema abuela, Yo….. Paré en seco por el frio de su mirada. Y continuó-  Entonces, recordarás que tus padres y yo te hemos advertido, que preguntar es peligroso?  Sí abuela, por favor, dime qué pasa? –pregunte al borde de los nervios. Y empezó a decir- En la Aldea están furiosos y asustados Vito, le han pedido a tu padre o que te callas tu o te callan ellos, no saben cómo responder a tus preguntas, se sienten perdidos y tú los haces sentir incómodos en sus rutinas, tus padres tienen el corazón roto, como Yo. Por eso, te he traído aquí. Porque debes irte, debes viajar solo a otras tierras, a buscar tus respuestas; antes que sea tu misma gente la que te acabe por ellas y tu espíritu. Pero… y mientras ella seguía hablando, mi mundo se caía en pedazos y mi cola se paralizaba, había sido exiliado!. Por mi propia gente? Por mi propia familia?. Y como si me leyera la mente o el rostro, continuó hablando… Es el regalo del Amor, el regalo de la Libertad, que lejos del exilio te da la posibilidad de saciarte. Pero, si te quedas Vito, morirás al reprimir tu naturaleza o harás que otros mueran al hacerlos dudar de la suya; cada quien debe encontrar sus propias respuestas y seguir a sus instintos. Nuestra familia te Ama y moriríamos al pedirte que renuncies a lo que Eres, solo te dejamos libre para que recorras los caminos que debes buscar; cuando el alma esta lista para avanzar, llegan las circunstancias necesarias para generar ese cambio. Y no hay otra forma que desde aquí, logres saciar tu curiosidad o que te podamos apoyar. Yo te he guiado en lo que he podido, tengo inmunidad y respeto por mi edad, por eso he sido Yo, quien quiso guiarte a este vórtice; pero tus padres y hermanos serán señalados largos ciclos hasta que el tiempo haga de las suyas, con lo que implica  el vació que deja tu voz y el dolor de tu partida. Vuelve cuando estés saciado de ti mismo, del camino y recuerda que lo que une la sangre, el alma y el corazón a través del Amor, jamás será cortado por la ley de la Aldea. Eres rápido, sabes más que muchos, sé inteligente y usa lo que has escúchalo, visto y leído. Sigue lo que Quieres y Usa TODO lo que tienes!. Y en un abrir y cerrar de ojos, se había ido, estaba allí en la jungla, en el vórtice del bosque, solo, con la única certeza que tenía que correr antes de que cayera la luna y los zorros quisieran cazarme; así que corrí, corrí y corrí, con las lágrimas en mis ojos, con la historia a mi espalda, con mi dolor en el pecho, con la carga de mis preguntas, con la incertidumbre de lo desconocido, con la vida en la boca y con la libertad deseada en mis manos, pero por horas, solo corrí y lloré, por días y noches.

Después de mucho correr, después del pantano y después del cansancio, encontré un refugio al pie del único árbol a campo abierto; allí la naturaleza era diferente; pero solo bajo el inmenso Samán, mi colita logro estar tranquila, así que conseguí descansar después de hacer una pequeña madriguera justa para mí y mi cesta. Me sentía vació, perdido, sin hábitos, después de tanto correr, era como haber ido a otro continente, estar habitando un nuevo lugar y no saber a dónde pertenecía. La cesta tenía comida, fotos, cartas, pero solo fue viendo el firmamento, las estrellas que destellaron al lado de la Luna, fue que pude abrazar a mi corazón y respirar, recordé mi sueño… la Estrella, la guía, Todo saldrá bien, Todo saldrá bien!, entonces opte por rendirme y parar de llorar, solo es un ciclo, solo una noche, respire profundo y confié que el sueño me mostrará el camino a seguir.

Pasaron muchos ciclos, de árbol en árbol, de campo en campo, de montaña en montaña, los sueños lo llevaron a crear rutinas, porque recordó que su madre decía “Cuando tenemos rutinas sanas y nos damos bienestar, somos capaces de lograr más!”. Empezó a hacer trabajos forzados, más peso de lo normal, más distancias de lo común para su tamaño, menos rapidez de lo que le habría gustado, dedicando horas también para explorar nuevas ídeas, divertirse y seguirse preguntando; ya que quería experimentar aquello de decía su abuela de, “Domar tu naturaleza y practicar la disciplina te hará fuerte!”. En cada sitio hizo amigos, diferentes seres, cada uno con un clan, cada uno con un talento, aprendió a disfrutarlos tal y como eran, a escuchar y a preguntar si se le daba permiso, más recordó que reír y confiar en su colita lo haría llegar lejos. Con ellos, descubrió el significado lo que su padre tanto repetía “Cuando conocemos la historia del otro, podremos respetar sus decisiones y sus heridas”, así que callaba cuando le contaban historias de tristeza y dolor, reía cuando había que celebrar y recordando su vivencia, se decía dentro de si  “Todo tiene su ciclo, a veces sube a veces baja, pero tu corazón siempre será el mismo; amalo”.

Muchos caminos, muchos rostros, muchas historias y el mismo ciclo se repetían en todos. Ruinas y talentos, miserias y riquezas, heridas y alegrías, llamas e hielos, amo y sumiso, todos dentro de mi; ambos complementándose, contemplándose y sentándose en mi misma mesa. Descubrí mascaras que en las rutinas ocultan el deseo del alma, ansiedades disfrazadas de afán que ensordecen el camino del espíritu, veranos que van, primaveras que llegan, otoños que pasan, inviernos que reposan, sed de afuera por no buscar adentro, llenura que no se encuentra con los frutos sino con seguir el aguijón que mueve mi cola, aprender y enseñar, dar y recibir, balancear. Pasé rato largo pegado en una aldea que me hacía recordar a la mía, pegado a una bella ardilla color miel que me tenía distraído, tuvimos una cría que no llego a la vida, así que la muerte y el nacimiento vinieron juntos a separarnos; pero no es fácil avanzar si eso implica soltar, nada fáciles son los amores que cambian de forma, porque te llevan realmente a crecer. Una noche me despertó un sueño, mi abuela volvía y me decía -Ya es hora de regresar, ciclos tenía sin verla y me decía que estaba lista para un ciclo terminar!. En el regreso, el vacio iba cediendo al paso de mi calma, iba cediendo a la fuerza de mi fe, y empecé a comprender que la Naturaleza de las cosas es única, inverosímil y perfecta. Comprendí que no hay prueba sin fuerza, , expansión sin contracción, que todo pasa por algo y que fue ese momento de exilio el dolor donde se abrió la puerta a la realización, ya no había preguntas, ni carreras, sabía lo que quería, solo respuestas cuando seguía a mi estrella, entonces al seguir y entregarme a mi destino, supe el significado de “El Tao no actúa, pero nada deja sin hacer”.

Llegue a la aldea y muchas lunas había borrado mi cara de los recuerdos, mis padres me bendijeron y me hice fuerte; no pude ver a mi abuela con vida, pero su regalo antes de partir me acompañó por siempre, así como nuestras largas charlas en sueños; supe que había mucho por hacer, por iniciar, por crear y empecé a diseñar lo que quería vivir desde la profundidad de mi nombre, lleno de alegría!. Qué tipo de servicio quería dar, que tipo de relaciones y vínculos crear, de amores experimentar, de crías y frutos cosechar, en que tipo de aldea y comunas colaborar; así empieza todo, deseando hasta que no lo necesitas. Su letra en la corteza, se convirtió en la reliquia y la oración de entrada a mi nuevo hogar “De los ciclos venimos y a los ciclos hemos de regresar; vivimos ciclos sobre la tierra y no hay ganancia a no ser que estés dispuesto a soltar.  Por los ciclos, el espíritu se experimenta en espiral y por los ciclos ha de moverse para avanzar, pero cuando el ciclo se repite sin parar, la vida se convierte en la ilusión de la carrera al Azar; entonces el animal olvida a que ha venido y el espíritu necesita el despertar. En la carne y los huesos se viven las fracturan y desploma lo que ya no sirve; entonces lo que era, ya no es, y es hora de llorar. Cuando el último grito ahogado sale, cuando el dolor es sufrido, cuando la voluntad se entrega y se deja de pelear con el destino; entonces sabrás que estás preparado para pedir, crear, seguir y dar paso a la reinvención, bendición del cambio al que te has entregado. Por los ciclos de los ciclos. Amén”

lunes, 16 de julio de 2012

Y donde queda ese lugar llamado Hogar?


Creencia es el estado de la mente en el que un individuo tiene como verdadero el conocimiento o la experiencia que tiene acerca de un suceso o cosa” –Wikipedia



Por muchos años de mi vida, cuando la palabra hogar aparecía frente a mí, la imagen del portarretrato con papa, mama, mis hermanos y yo; aparecía desde mis recuerdos más profundos  haciendo que inmediatamente asociara el construir un Hogar con el estereotipo de el matrimonio, los hijos y la casa. Por muchos años esta creencia, como el cuento de la rana, me hizo rebotar más de mil veces con el muro que implicaba vivir con esta; ya que en paralelo una de mis creencias más fuertes era el “volar y volar por el mundo libremente”, por lo tanto era un doble conflicto, por un lado; el construir un Hogar era impensable a no ser que llenara antes todos estos requisitos previos, como el esposo, los hijos, la casa, la foto, el portarretrato y el “fueron felices para toda la vida”; y por el otro uhmmm pero y ¿Cómo se sigue siendo libre y feliz con todo ese paquete contigo?.

Así que crecer, para mi implico empezar a desojar la cebolla, una capa a la vez, ya que primero había que reconocer que protección y la libertad, en vez de competir, podían vivir juntas en un mismo Hogar; y Si! Como dice una amiga en criollito “Veeeeee pero la mía es LA Cebolla” jajajajajaja… Pues si, cada etapa que avanzamos, cada meta, cada relación nos sigue desafiando a ir quitando una capa más de esa cebolla, que ya sea en cámara lenta o acelerada te impulsa a llegar al meollo del asunto. Por esa misma dualidad, entre libertad y fotografía, es que me he mudado aproximadamente 15 veces desde que tengo uso de razón; si hablo de las últimas ocho que están directamente a mi cargo, cada vez que la palabra casa aparecía, la búsqueda de la misma coincidía con  algún estres y conflicto ya que me costaba reconocer que esa necesidad de "hogar" era personal, privada y relacionada con la búsqueda de un espacio propio, de libertad y de comodidad que implicaba para mi, una sensación de seguridad y autoprotección.

Sin embargo, me di cuenta que por más lugar físico, paredes, comodidad, el hogar tenía otro significado; primero se trataba de mí, no de otros, se trababa de mirarme y reconocer que en otro escalón, mi hogar soy Yo, la seguridad de mis talentos, la fuerza de mi constancia, a mis proyectos, a mis sueños, la lealtad a mi amor propio, el poder valerme por mis propios recursos, el construir de cero, de sostenerme por mis propios pies, de no cargar a nadie, de tener la libertad para redescubrirme y reinventarme; para mí era lo que debía llenar primero, y solo así, solo allí, luego poder compartir y construir un Hogar para una pareja y unos hijos. Paradójicamente, viviendo en Toronto, me mude también, por tres meses decidí la experiencia de vivir con una familia Canadiense, la casa, el cuarto y la “privacidad” fueron de esas comodidades que me hicieron decidir una y otra vez quedarme allí; sin embargo, peleas, gritos, no poder disfrutar de un domingo sin hacer nada, sensación de no tener un espacio para recuperar energía y el cuidado excesivo de ver lo que hacía o no, a la final me dejaron exhausta.

Además, me dejo la confirmación de que Hogar no es un lugar físico donde la comodidad yace, hogar es una sensación que te acompaña, un espacio que empieza a crearse en el corazón y con una calidez que es la que te permite ser paciente, tolerante o amable contigo y con los que contigo viven. Hogar para mí, Gracias a este tiempo y a punto de mudarme a mi propia casa, también ha sido un proceso de seguir reconociendo en mi corazón, a mi propio Espíritu creador; así que esta próxima mudanza me regalo la bendición de reencontrarme con mi verdadero Hogar. “Ese rincón donde mi espíritu tiene lugar, donde mi mente se serena y encuentra un orden, donde mi corazón sabe con certeza, que todo ciclón pasa, donde me siento protegida a pesar de mis miedos, donde siento el refugio de mi alma ante las tormentas y donde solo SU calidez me alimenta con la fuerza del Amor, para seguir avanzando”.

“Cada quien tiene una forma particular de matar las pulgas”, dicen en mi pueblo y aquí entre muchas culturas diferentes me doy cuenta que los Hogares empiezan a construirse cuando Respetamos la individualidad, es decir, tu y yo somos iguales y también diferentes a la vez; cuando empezamos a ver en nuestros espejos y creencias podemos reconocer nuestras heridas; más definitivamente, hay quienes vinimos a viajar solos, con el reto de reencontrarnos con el “Hogar” y así darnos el regalo de abrir ese espacio para vivir nuevas alianzas y acuerdos; hay otros que viajan en comparsa o dúos, con el reto de transformar ese espacio conocido u “Hogar” y abrir la puerta para reconocer explorar que eres un ser creador e independiente. La pregunta es, donde estas tu? Que es Hogar para ti? Como se construye? Donde empieza? Cuando termina? O si el tipo de Hogar es el que realmente deseas vivir o una secuencia de frustraciones por lo “que deberías” vivir?

“Y solo una palabra tuya bastará para sanarme” es una frase famosa en la Biblia, porque es así como empieza todo; nuestras palabras estás directamente relacionadas a las creencias que hemos ido acumulando y apegándonos en el camino, y a la vez son nuestras emociones producto de nuestros pensamientos también. Así Hogar también es ese espacio donde conservas tu energía, si vives pensando en alguien día y noche, por apego botas tu energía vital y a la final el cansancio por no mencionar el peso que cargas en el otro, tampoco te deja disfrutar de tu Hogar. Tiempos de cambios siguen llegando y todo lo que por apego ha estado en nuestras vidas, de manera drástica ha de desaparecer, si es que nuestro anhelo es seguir construyendo de otra manera. En nuestro hogar nacen por repetición inconsciente, todos los patrones que hoy marcan también nuestras creencias limitantes o potenciadoras con respecto a la Pareja, al ser padres, al dinero, al crecer, al relacionarnos; a todo!; parte de honrar es saber que ellos hicieron su mejor trabajo, pero también es tiempo de reconocer que eres grande también y que hay otras creencias potenciadoras esperando por tí, otros lentes que te lleven a ver la realidad desde otra perspectiva. Entonces, que parte de ese Hogar, debe transformarse YA, para vivir auténticamente? Que maletas deben ser ya abiertas, depuradas y cuidado si no desocupadas, para que nuevas experiencias lleguen? Es tu hogar, ese corazón capaz de sostenerte en estos cambios? Estás list@ a construir este espacio? Estás list@ para tí?

“Volver al hogar es sinónimo de tomar refugio en nosotros mismos, es tomar contacto con nuestras emociones, percepciones y pensamientos, juntos con reconocerlos y hacer la práctica de aceptarlos, es percibir nuestra capacidad natural de estar y sentirnos vivos. Volver a nuestro hogar es sinónimo de darnos cuenta que la vida transcurre aquí.”-IGNACIO FERNANDEZ¹

“Una pareja se logra cuando toma su fuerza y su prioridad frente a sus hijos, preservándolos de las discusiones y desencuentros; cuando está bien anclada en el reconocimiento de las familias originales y cuando pueden desprenderse de éstas al punto de la que la nueva familia creada es, por fin, más importante que las parejas anteriores y que la familia de origen.”-  JOAN GARRIGA




domingo, 24 de junio de 2012

Tiempo de Margaritas!!!


Cuando veo margaritas, es inevitable que venga a mi el recuerdo de ese juego que de niños, o niñas, mejor dicho jejeje que teníamos con ese famoso “me quiere, no me quiere, me quiere…”, lo maravilloso es que desde pequeños sabíamos que si la respuesta de la margarita terminaba en ‘si’ o ‘no’ esto podía cambiar todo lo que en relación a nuestros sentimientos se refería, es decir un solo pensamiento de que si te quería o no, te podía con la inocencia de un niño hacer creer en esa “verdad” y hacerte pasar tu mejor o peor  día. Lo más particular del caso es que siendo tan niños, igual éramos capaz de sospechar como iba a terminar la historia, al punto de que sencillamente tiraras la margarita antes de tiempo y te dijeras “Y quien va a creer en Margaritas!!” o hicieras “trampa” para que la respuesta diera “SI”.


 Tiempo de Margaritas, vino a mí como una frase al ver una imagen que me conecto con ellas, pero la curiosidad me llevo a ver con que estaban relacionadas las margaritas, ya que parece mentira como cada palabra te va conectando con algo más profundo dentro de ti; así que buscando encontré que la palabra ‘Margaritas’ que en Ingles se traduce en ‘Daisies’ o ‘Daysi’ en singular, además de referirse a la flor, habla de que la palabra ‘Daysi’ proviene del Viejo ingles que significa ‘day´s eye’- "día de los ojos", ya que sus pétalos se abren al amanecer con el Sol y cierran al anochecer; lo que conectado también con el latín medieval significa "los ojos del sol."¹ Por otra parte, causalmente para la medicina floral, las margaritas están relacionadas con El Amor, con lo fresco, diría casi que con la renovación; así que, en un segundo, comprendí porque la frase “Tiempo de Margaritas” había llegado a mi mente, ya que me mostro, que lo que esa imagen me quería decirme es que ya es Tiempo para ver, Tiempo para ver el Sol, Tiempo para conectarnos con nuestra esencia y sus contrastes, Tiempo de Volver a nuestra naturaleza y sus extremos, Tiempo de reconocer el Amor, “Tiempos para ver, Tiempos de Amor”.


Nuestra Naturaleza… tanto podemos decir de nuestra naturaleza, y segura estoy,  de que por más que hablemos nadie nos puede poner una etiqueta exclusiva, hablaba ayer con unos amigos y salió como parte de la conversa, que nuestra naturaleza es arrasar y exterminar pueblos, los ingleses y franceses a los nativos americanos, según el antiguo testamento los judíos a los pakistaníes, los aztecas a los demás pueblos indígenas, los españoles a los aztecas, los alemanes a los judíos, los americanos, los vietnamitas, los iraquíes, los americanos, los romanos, los persas son todos, una eterna representación de la cadena de quítate tu para ponerme yo;  hoy incluso siguen vigentes pero con una máscara que trata de ser más sutil para evitar juicios directos, o acaso destruir a nuestra naturaleza en nombre de la evolución no es parte de nuestra muestra de inmenso poderío? Trabajar, trabajar, trabajar, producir, producir, producir, comprar, comprar, comprar, vender, vender, vender, tener, tener, tener, acaso no se ha vuelto en un nuevo tipo de guerra disfrazada que nos mantiene presos, paralizados,  dominados, dormidos o esclavos de un nuevo tipo de Guerra?


Hace unas semanas aquí en Toronto, hubo un evento al aíre libre, lleno de artistas espectaculares, alegría, belleza, comida, gente por doquier compartiendo, fue hasta divertido ver como aún con un aguacero encima nos quedamos y esperamos que el show siguiera o como con casi 10° de temperatura había una niña junto a mi disfrutando el placer de su helado; lo irónico es que mientras estábamos embelesados entre la excitación de lo nuevo, la gente, el placer de la música y la variedad de comidas, ni supimos que a menos de media cuadra de allí, en pleno centro dentro de un área comercial reconocida, media hora antes hubo en tiroteo, que dejo un muerto y siete heridos. No sabría decir si lo más irónico fue eso, fue que las noticias de las dos semanas siguientes no mencionaron nada de lo bueno que había pasado en la ciudad ese fin de semana y solo hablaban del tiroteo o fue que a los días de eso, el Alcade de la ciudad Rob Ford, salió diciendo en noticias, "This is a safe city and I want people to continue doing what they do every day: go out with their families, go shopping, have fun with their families." Es decir, "Esta es una ciudad segura y quiero que la gente siga haciendo lo que hacen todos los días: Salir con sus familias, ir de compras, divertirse con sus familias", ironico no? O fue, que a la semanas hubo otro tiroteo en otra zona, “Little Italy” y pocos supieron la noticia porque pocos escribieron de eso, interesante esto de la libertad de expresión, de la democracia, no? Si importar banderas o colores, irónico es ver cómo las autoridades, políticos, medios, manipulan nuestra mente, para pretender que lo que pasa es lo que ellos quieren mostrar que pasa, nada pasa o pasa de todo, pero que es lo real? Que es lo que debemos ver? Que es lo que debemos cambiar o aceptar? o es que estamos tan cómodos en el sistema, que es preferible ni pensar en las dos caras de la moneda?, también es interesante, no?. Una cadena de poder, de dominación, de miedo, de sumisión, de abuso, de silencio, de comodidad, de control, de quien tiene más, de quien se cree mejor, quien cree tener el mejor Dios, la razón. Por otra parte, también es irónico saber que la tasa de asesinatos en Canadá es de 60-80 muertos por AÑO, casi me iba dando un infarto al comparar la cifra con nuestras 60-80 personas por semana solo en Caracas, entonces quien define, que es lo normal? cuál es  Nuestra naturaleza o cuál debería SER?


El punto es que nadie habla de esa parte de Nuestra Naturaleza que nos lleva a cuestionarnos, a buscar, a investigar, a estudiar, a crecer, a preguntar, a re-conocernos, a respetarnos, haciendo posible que seamos capaces de transformarnos a nosotros mismos en personas autenticas, desde Einstein los avances de la ciencia, la Física cuántica y a la Neurociencia, han acelerado nuestro entendimiento sobre el poder  de nuestra mente y su impacto directo sobre nuestro cuerpo y emociones, dándonos una nueva visión sobre lo relacionado que estamos con todo, cuerpo, mente, instintos, energía, como una red única; haciendo más evidente como nuestra realidad está conectada directamente con nuestros pensamientos, interpretaciones y creencias; vemos como el caos nos ha llevado a preguntarnos y respondernos, como es el caso de un Harville Hendrix que nos ha dado dar una visión más completa de cómo podemos a través de la experiencia de pareja reconocer nuestras propias heridas, patrones y como el vivir juntos es la única forma de ir sanando, disfrutando y creciendo; o como a través de la nueva ciencia Epigenetica, el Biólogo Bruce Lipton ha probado como nuestros genes no tienen poder sobre nosotros o nuestra salud,  ya que es la interpretación de lo que ocurre a nuestro alrededor lo que tiene impacto directo  nuestra salud y forma de vida, nuestros alimentos, ambiente, forma de relacionarnos y cómo vamos etiquetando cada uno de ellos, pueden ser nuestra condena de muerte o nuestra fuente de vida, y  solo por mencionar unas de las infinitas cosas que nuestra humanidad también es capaz... tambien es parte de Nuestra Naturaleza Re-encontrarnos con ella.
Sin ir tan lejos, tan afuera, parte de Nuestra Naturaleza es Vivir; lo dice los números donde hemos aumentando año a año nuestra Esperanza de Vida, de 50-65 años hace 30 años a 75-80 años promedio en estos días; y aún cuando se habla siempre de cuantos mueren, mientras  para el 2011 por cada 1000 personas del mundo la tasa de muerte era del 8,12; lo cierto es que para el mismo año por cada 1000 la tasa de nacimientos era de 19,15. Eso es más del doble, es decir, si, somos capaces de matar, de morir, de sufrir; pero también día a día somos capaces de seguir buscando, buscando respuestas, buscando opciones, buscando besos, conociendo gente, enamorándonos, creando familias, amando, errando y volviendo a empezar, construyendo amigos, relaciones, sintiendo, soñando, creando, Viviendo. Nuestra Naturaleza, también es vivir sin estrés, es disfrutar, es reír, es fluir, es confiar, es soltar, es decidir, es conversar, reunirnos, vernos, escucharnos, respetarnos, sin embargo, nuestras creencias y las creencias que se han levantado a nuestro alrededor y, las que hemos aceptamos como mandatos ultimos, nos han llevado a creer que si corro y dejo de respirar, soy exitoso; que la única manera de producir dinero, seguridad, bienestar es perder la vida en el camino, que si siento miedos y algo me dice que está mal la realidad, soy un negativo o un anti algo; que si lloro, me duele, me siento solo, o sencillamente prefiero algo diferente, soy raro porque son emociones que no son aprobadas socialmente, que si aprendo diferente soy esto o aquello. Así, vivimos también rechazando Nuestra propia esencia, esa que es capaz de Amar y Matar, esa que es capaz de proteger y dominar, esa que es capaz de ser dulce pero que también es capaz de maltratar, esa que es capaz de amar y también de manipular; esa misma esencia que es capaz de vivir ideas que expanden y esa misma que dejamos nos meta en una caja y nos etiquete.

Acaso no es nuestra naturaleza y nuestra esencia vivir en esta Tierra con la Luna y con el Sol? Acaso no es la luna un espejismo que solo refleja la luz del sol en la Tierra? Acaso no son nuestras emociones más oscuras, la oportunidad más grande de ver el sol dentro de nosotros? Acaso no son esos momentos difíciles, esas pruebas, las que te han hecho más autentico hoy? Nuestros talentos siempre van acompañados de retos, de ciclos; o acaso no es nuestra naturaleza aceptar y amar, que somos ambas cosas juntas? Luz y sombra, guerra y paz, amor y miedo, victimas y perpetradores, nada y todo; cuerpo con instintos, emociones con respuestas, mente con creencias limitantes o no, espíritus con búsquedas y Propósitos.

“Tiempos para ver, Tiempos de Amor”, porque es el tiempo de reconocer que si como experiencia humana vivimos los extremos es para seguirnos experimentándonos,  para seguir escogiendo, para seguir decidiendo que clase de vida queremos, que clase de experiencias, de vida en pareja, de familia, de salud, de amigos, de comunidades, de mundo; seamos como seamos es hora de abrazar lo que somos, así mitad blancos, mitad negros como el Ying y Yang. “Tiempos para ver, Tiempos de Amor”, porque antes de que las margaritas te digan si esa persona te ama o no, es importante Re-Conocer que la persona que más he esperando en mi vida Soy Yo, ese espíritu que para Re-conocerse como un todo, elige la sombra que acompaña a mis dolores y la luz que brilla junto a mis carcajadas; porque es mi Naturaleza y en ella, Soy completa, Soy amada y protegida, por esa energía infinita que es Dios en y alrededor de mi; entonces, allí Soy capaz de elegir y compartir con otros mi verdadera naturaleza.